- Luisa MarÃa Morales
- 31 mar. 2020
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 13 may. 2021

Los cambios mundiales tomaron por sorpresa a muchas empresas este año, muchas empresas no han logrado adaptarse rápidamente y están teniendo más pérdidas de las que habÃan contemplado.
Uno de los factores determinantes es la tecnologÃa. Muy cómodamente habÃamos ejecutado nuestros procesos a lo que se ajustaba a esa época o por lo menos asà lo pensamos.
La llegada del COVID-19 genera la clara necesidad de evitar el contacto fÃsico, entonces:
¿Cómo podemos medir el desempeño de las personas?
¿Si están en sus casas significa que se encuentran trabajando?
¿Todos los proyectos quedan rezagados hasta que la situación se "estabilice"?
Antes que nada debo notificar que lo primero que debe cambiar es el PARADIGMA. Hemos creÃdo que las personas necesitan un "capataz" para trabajar, nada más alejado de la realidad.
Estudios comprueban que el compromiso de los trabajadores mejora cuando tienen la opción de manejar su tiempo y ser medidos por los resultados que presentan, más que por cumplir un horario
restrinjido de trabajo.

Sin embargo, cambiar el paradigma no es suficiente. Se necesita asegurar que este estilo de gestión funciona, pero
¿En verdad funciona la gestión por resultados y a distancia?
Quisiéramos dar una respuesta monosÃlaba pero no es posible, la verdadera respuesta es que depende, y depende de varios factores:
¿Cuáles factores se deben considerar?
Según Alexandra Gamarra, existen seis aspectos fundamentales que deben tenerse en cuenta al planear la implementación del teletrabajo:
Gestión
Cambia el enfoque; en lugar de controlar los horarios, haz seguimiento a los colaboradores por cumplimiento de objetivos. Si la naturaleza del rol no permite la gestión por objetivos, existen herramientas de gestión automática de productividad que facilitan esta labor.
Productividad
Estudios han mostrado que el teletrabajo resulta en un aumento de 23% en la productividad y una reducción de 63% del ausentismo
Un colaborador que puede enfocarse en metas fijadas mientras disfruta un mejor balance entre la vida laboral y personal es más productivo
Costos
Inicialmente hay que realizar inversiones para que el teletrabajo funcione, pero estos costos retornan en el mediano plazo con ganancias en productividad, reducciones de costos en planta fÃsica y mayor bienestar de los miembros del equipo.
PolÃticas
Implementar el teletrabajo requiere una revisión de las polÃticas corporativas, incluyendo los principios que rigen el modelo dentro de modificaciones expresas dentro del contrato de trabajo.
Cultura organizacional
Un cambio de metodologÃa necesita un cambio de mentalidad de la parte de los supervisores y colaboradores también
Para que una cultura más flexible basada en la confianza exista, hace falta implementar herramientas tecnológicas que apoyen a los colaboradores a mejorar su autogestión y disciplina.
Tecnológicos
Para facilitar comunicación constante entre el equipo, transferencia segura de información, videoconferencias, almacenamiento en la nube y lo esencial, métricas objetivas para la autogestión de productividad, es imprescindible acudir a la tecnologÃa.
Si bien son varios los aspectos que deben tenerse en cuenta para implementar nuevas formas de trabajo y esto puede parecer complejo en la etapa inicial, los beneficios que se perciben superan de manera significativa la inversión inicial cuando el proceso se realiza de manera adecuada y, desde el principio, se establecen reglas claras, tanto para la empresa como para sus colaboradores.
¡La comunicación y el respeto mutuo son claves!
La mejor manera de conseguir los resultados esperados es comunicar efectivamente y entender que debe haber un balance entre las expectativas de la compañÃa y de los colaboradores. La empresa por su parte espera compromiso y productividad mientras que los colaboradores desean un mejor balance entre vida laboral y personal.
